¡Hoooolaaaa hoooolaaa, bellezas! -esa
intensidad, Micaela- ¿Cómo están? ¡Feliz año! (re que estamos a 23 de enero,
Micaela. Bueno, pero no había hecho ningún post por acá -se autorespondía
ajjaja-). Hoy vuelvo con una reseña de un libro que me encantó y se titula “El
lápiz mágico de Malala” escrito por Malala Yousafzai e ilustrado por Kerascoët.
A continuación, les cuento un poco los motivos de mi adoración a esta lectura y
por qué creo deberían descubrirlo ustedes también.
Ficha técnica:
Libro: El lápiz mágico de Malala
Titulo original: Malala’s Magic Pencil
Autora: Malala Yousafzai
Ilustraciones: Kerascoët
Editorial: Alianza
Páginas: 48 páginas
Dimensiones: 27 x 24 cm
Año de publicación: 2017
ISBN: 978-84-9104-883-1
Precio: $U 680
Sinopsis:
Cuando Malala era niña en
Pakistán quería tener un lápiz mágico. Lo usaría para:
-poner un pestillo en su
puerta; así sus hermanos no podrían molestarla.
-detener el tiempo para dormir
una hora más cada mañana.
-borrar el olor del basurero
que había cerca de su casa.
Pero, con el tiempo, su mundo
cambió, lo mismo que sus deseos. Su derecho a ir a la escuela se vio
amenazado... simplemente porque era una niña. En vez de un lápiz mágico, Malala
cogió uno de verdad. Sola en su habitación, escribió sobre los desafíos a que
se enfrentaba, pero sus palabras llegaron a gente de todo el mundo.
Antes de profundizar en la
reseña de este increíble libro, me gustaría mencionar algunos aspectos sobre la
vida de Malala Yousafzai, su autora.
Malala Yousafzai |
Nació en Pakistán en 1997, creció
en un país destruido por la guerra, pero el amor en su familia nunca
faltó. Este cariño le permitió tener
esperanza, imaginar y soñar con un mundo mejor para ella y muchas niñas más. Se
propuso luchar por la igualdad de los niños, un presente y futuro en donde
todos pudieran acceder a una buena educación dentro de una Institución.
Cuando el régimen talibán tomó
el control del Valle de Swat (2008 y 2009), muchas escuelas comenzaron a ser
cerradas, entre ellas la que dirigía el padre de Malala -a la cual ella asistía-.
Pese a esta limitante algunas niñas y maestras, continuaban concurriendo a las
escuelas, pero otras se mudaron y abandonaron sus clases. Ella sentía la
necesidad de expresar lo que estaban viviendo y empezó a escribir (con un
seudónimo y de forma anónima) en un blog, en el servicio urdu de la BBC. En sus
publicaciones hablaba a favor de la educación, y mencionaba los motivos por los caules todos pudieran acceder a ella.
En 2011, recibió el Premio
Nacional Juvenil de la Paz, instituido en Pakistán en 2011, como también otros
grandes reconocimientos. Pero su activismo casi le cuesta la vida, en 2012. Cuando volvía de la escuela, intentaron asesinarla y recibió dos impactos de
balas en la cabeza. Las heridas no fueron de gravedad y meses después volvió a
estudiar. Debido a las contantes amenazas de muerte que recibía, se mudó junto
a su familia a Inglaterra. Pero esto no la detuvo, continuó alzando su voz, y
luchando por los derechos de niños y niñas, creando en 2013 un colegio para
niñas en Pakistán, Líbano y Jordania. Su compromiso fue tal, que en 2014 fue
galardonada con el Premio Nobel de la Paz. Tres años después, fue nombrada
Mensajera de la Paz de la ONU.
Este libro narra la historia
de Malala. Nos remonta a la niñez de esta joven tan reconocida debido a su
arduo e intenso trabajo por lograr la educación pública en su país. Pero,
principalmente, devolverles a las niñas el derecho a la educación, ya que los
talibanes (facción política-militar-religiosa de Afganistán, seguidores de un
idealismo ultraconservador del islam) en el año 1996 toman el poder de la
capital de Afganistán, Kabul y comienzan a imponer estrictas leyes islámicas a
la población, entre ellas, ordenar el cierre de las escuelas privadas y
prohibir a las niñas el acceso a la educación.
Ella anhela tener un lápiz
mágico, antes de dormir pedía cada noche encontrar uno en su mesa de luz (tomando
la idea de un programa televisado, protagonizado por un niño que usaba uno para hacer el bien), con él quería dibujar
y escribir cosas que deseaba para mejora el mundo, como crear más escuelas, o
cumplir el sueño de otras personas. “si tuviera un lápiz mágico lo utilizaría
para dibujar un mundo mejor, un mundo en paz”, “borraría la guerra, la pobreza
y el hambre. Después dibujaría a niñas y niños juntos como iguales”.
Pero un día dejó de soñar con
ese lápiz y empezó a alzar su voz, a decir lo que estaba pasando en el valle de
su ciudad, contar su historia, y dar esperanza, alentar al resto para luchar y
alcanzar sus sueños.
En un momento de la narración,
Malala menciona, y cuestiona, el hecho de que una niña de su edad se encontrara
clasificando basura en lugar de asistir a la escuela (como lo hacía ella). Su
padre, se encarga de que mostrarle otras realidades que la rodeaban, como, por
ejemplo: no todas las niñas y niños pueden acceder a una educación gratuita,
sino que las circunstancias a las que se enfrentan sus familias son
distintas, deben trabajar, cuidar a sus hermanos más pequeños, o ayudar en las
labores domésticas.
Malala lucha por sus sueños,
vence la realidad de una cultura que reprime a las mujeres, que no les permite
expresarse libremente y luchar por sus sueños.
En lo particular estoy
enamoradísima de esta edición, cuando me lo hicieron llegar desde la Distribuidora Origen (mil gracias a ellos por darme la oportunidad de descubrirlo), quedé en "stand by", asombrada, embobada, no sé
cómo describirlo. Lo cierto es que me gusta mucho, es una edición en tapa dura,
tiene una sobrecubierta idéntica a la tapa y contratapa del libro (detalle que
me sorprendió porque siempre suele ser liso bajo la sobrecubierta). Las
ilustraciones de Kerascoët, son increíblemente lindas, colores suaves, con
mezcla de pastel y acuarela, toques de dorado, con mucha luminosidad y muy
representativos.
Si bien es un libro que posee
menos de 50 página, contiene ilustraciones y la autora afirma que lo escribió
para niños, me atrevo a recomendarlo para cualquier lector, sin importar su
edad. Creo que es una historia que perfectamente se puede leer en una escuela, en familia, o dejar que los niños lean por sí solos. Un adolescente, joven o
adulto puede disfrutar perfectamente de él.
El la reseña de Mujer y maestra de Viviana Rivero, hice mención al proceso que llevó lograr la educación laica, gratuita
y obligatoria, y en esta obra, se ve reflejado en gran medida este cambio
cultural, social y político. Muchos somos ajenos a las realidades de otros países,
tanto sociales, económicas, políticas o religiosas de esas personas.
Para poder reseñar este libro,
me dediqué a leer un poco más sobre Malala y el rol femenino en Afganistán y
aprendí muchos aspectos que desconocía. A modo de resumen (y para aquellos que
estén interesados), les dejo un breve artículo publicado por el diario “abc” de
España, que menciona algunas de las tantas prohibiciones que les imponen los talibanes
a las mujeres, el trato que reciben y la violación de sus Derechos Humanos → Link←
Porque todos podemos luchar
por nuestros sueños y derechos. Te invito a buscar tu propio lápiz mágico, pero
antes, descubrí cuál fue “El lápiz mágico de Malala”. En este libro, Malala nos alienta a nunca perder las esperanzas, y nos afirma que no hay excusas para alcanzar los sueños y que no necesitamos de un lápiz mágico. La magia está en cada uno de nosotros, por ser únicos, por luchar cada día en ser quienes realmente queremos ser.
Como siempre, siguiendo el link podés encontrar frases que me gustaron o que me parecieron significativas durante la lectura de: El lápiz mágico de Malala
Valoración:
Muchas gracias por tomarte el tiempo de leerme y haber llegado hasta el final. Es un placer para mí haber compartido contigo un nuevo descubrimiento. Espero que te haya gustado la reseña y haber despertado el bichito de la curiosidad en vos. Como siempre, no dudes en dejarme tu opinión, comentario, crítica constructiva y compartir con otros lectores ¡Te espero pronto para descubrir un nuevo libro!
No había oído antes de ella. Su historia es interesante y da para mucho; por lo que vi hay ya varios libros escritos por ella sobre la situación en Pakistán.
ResponderEliminarEstá bueno la existencia de esta clase de libros, orientados en principio a un público más bien infantil, sobre las condiciones sociales en otros países lejanos al nuestro. Creo que a veces se requiere un mayor trabajo o talento especial para transmitir mensaje un poco fuerte a los niños, y que sin embargo sea comprensible y no distorsionado por el medio elegido. Diría es el mismo conocimiento de otras culturas lo que permite arrojar luz sobre la nuestra, y no tomar distintos aspectos o comportamientos dogmáticamente, y así considerar cómo es posible cambiarlos, lo que hace la exposición de otras sociedades y culturas lejanas a la nuestra especialmente importante durante la infancia.
Que reseña más inspiradora! Gracias, Mica 😺
ResponderEliminarHola, linda! Qué precioso libro y qué persona más fuerte y admirable que es Malala. Muchas gracias por reseñarlo ♥
ResponderEliminarBesotes!